Traductor: Laura Navarro AlegriaRevisor: Aitor Ortega Voy a intentar hacer lo mejor que puedo porque... estoy nerviosísimo. Pero... voy a hablar de... lo bonito y positivo de fracasar en el amor. Es que entre todos vamos a deshacer ese concepto de "fracasar". Está claro que en el amor podemos identificar muchísimos fracasos. Voy a centrarme en tres: fracaso a no ser correspondido, fracaso a... no ser feliz dentro de nuestras propias relaciones de pareja, y el fracaso a que se sesgue una relación por la que tú lo diste absolutamente todo y no llegó a donde tú querías, posiblemente querías que fuesela relación de tu vida y al final acabó antes de lo previsto. Y diréis... qué me va a contar a mí ese chaval con relación al fracaso en el amor, si yo le contara... Y ahí es donde yo quiero llegar, a lo interesante que es que lo compartáis. El amor es un concepto universal que une a todo el mundo y, por ese motivo, bueno, y por muchos más, hay que centrarse en todo lo bueno que nos pueda aportar. Yo llevé a cabo una idea, que fue recorrer todos los lugares que pudimos, unos amigos y yo, con un cartel que ponía: "Escucho historias de amor gratis". De esas casi 300 historias que escuchamos, leímos, nos enviaron de todas las formas que pudieron, 18 forman parte de "De tu corazón a mi libro", un libro de historias de amor real. Realmente ocurrió que nos dieron un nuevo punto de vista, un nuevo paradigma de decir, bueno el amor tiene muchos, muchos ápices. Y... lo que hicimos fue recorrer todas las relaciones o una parte muy significativa de ellas desde los años 20 hasta la actualidad. Y nos encontramos con que gente nos venía a contar situaciones que podían estar relacionadas con el fracaso. Pero, vamos a darle la vuelta. Por ejemplo, el fracaso a no ser correspondido. Si esto ocurre cuando eres un niño, muchos de vosotros os sentiréis identificados, recordáis ese momento que estáis en clase, en el cole, y en diagonal a vosotros hay una chica de pelo rubio media melena, por aquí o un chico muy guapo: moreno, ojos azules y decís: "Es que me encanta ese tío" y decís: "Me aventuro" y, claro, analizas toda la información que tienes de todas las películas, comedias románticas, que visteis hasta ese momento y decís ¿está fácil, no? Cojo una rosa en el rosalque hay de camino al colegio, llego al patio, clavo rodilla, y le digo "Te quiero". Pero claro, ahí ya nos encontramos con una de las lecciones más importantes que vamos a tener en nuestra vida: El primer "No". Esa primera bofetada y ridículo delante de todo el colegio que es muy importante tenerlo. Y, cuanto antes, mejor. Porque venimos de lo mejor de nuestra familia, de nuestro padre, de nuestra madre, que nos trató genial desde pequeños y todo era que sí y resulta que no es tan fácil conseguir las cosas y ahí nos dicen dónde está ¿no? Después, hay otra lección interesante que es que tienes que intentar hacer las cosas, intentar conseguirlo. No puedes quedarte en: ¿Y si lo llegase a hacer en ese momento? Yo podría intentar definirlo lo mejor que puedo, pero creo que lo hace muchísimo mejor un tal Bruce Lee, con su frase de "Más vale... cicatriz en la piel por valiente que piel intacta por cobarde". Si nos vamos a ese mismo fracaso, pero en edad adulta, pues nos puede ocurrir, tal vez nos ocurrió a todos, ¿no?, que nos rechaza una persona a la que amamos. Pero es que estar enamorado, y no sé si vosotros lo experimentasteis pero yo sí, es la fuente de energía más grande que podemos atesorar. El ser humano no creo que sienta algo mucho mejor más allá de estar enamorado. Entonces, si por el motivo que sea, no te aman, no ocurre nada. Porque nosotros, y esto también lo reza otra película, "El ladrón de orquídeas", no somos lo que nos aman, sino lo que nosotros amamos. Si no te aman, bueno, no pasa nada, con esa sobredosis de energía que tenemos en ese momento, que vamos chutados a todas partes, pues podéis llevar a cabo un sueño que tengáis pendiente, por ejemplo, no sé, escribir un libro. Después, nos encontramos con el fracaso de que no somos felices en nuestras relaciones. Y eso directamente es culpa nuestra. Si os paráis a analizar, seguramente no escogisteis a vuestra pareja por ningún atributo que tenga que ver con la actitud. Sino por... se elige a las parejas porque es guapo o guapa, popular, porque tiene cierto estatus. Son cosas que no tienen nada que ver con lo que a ti te va a hacer feliz en esa relación. Y lo hacemos única y exclusivamente con las relaciones. Porque si os vais al resto de personas que conocéis y que apreciáis no las escogisteis en ningún momento por el currículum. Dijisteis... vamos a ver, ¿por qué quiero a mi familia? Si os paráis a analizarlo, bueno, porque desde pequeño me arropan por las noches, me ayudan con el disfraz de carnaval, me preparan las lentejas que tanto me gustan, esas cosillas, ¿no? Y si vas a la amistad es igual. ¿Yo por qué quiero a mis amigos? ¡Ah, bueno! Porque están siempre ahí, porque me hacen reír, porque me dan la mitad del bollicao en el recreo, eso es una maravilla. Entonces, eso os da una lección increíble, y es muy poderosa, que es, que a partir de ahora, a partir de ese fracaso, empezaréis a valorar la importancia de las pequeñas cosas, de esas caricias, de que la persona te apoye en todas sus locuras, de que sea positivo o positiva, y las tendrás muy en cuenta en la siguiente relación que te aventures a tener. Y por último... a nivel fracaso, de esos tres fracasos que os he hablado al principio, que poco me gusta esa palabra, la verdad, voy a ir al de que tú lo diste todo, apostaste todo por una relación ¡y se sesgó! Aquí... hay un trámite, hay un punto, que es el dolor. Muchísima gente se intenta apresurar a evitar ese dolor, a que lo pase lo antes posible. Y las cosas tienen sus tiempos. Ese dolor hay que vivirlo. Y hay tantos mitos relacionados con el amor que eso hay que empezar a derribarlos desde ya. Desde los príncipes azules de Disney hasta uno tan manido, y a mí este sí que me mosquea ¿no? El de un clavo saca otro clavo. ¿Ya me diréis, cómo? Porque yo tengo aquí este clavo, tengo este otro clavo, tío. Es que por mucho que me ponga aquí e intente, no, no voy a ser capaz, no, es que no, no hay forma. (Martilleando un clavo) No, lo que voy a conseguir es liarla parda, ¿no? O sea, se me va a torcer el clavo, y no voy a conseguir sacar el clavo, ni mucho menos, sino que voy a añadir un problema a mayores. En las relaciones ocurre exactamente igual. No hay que precipitarse en meter a otra persona en tu vida, porque posiblemente lo que acabes consiguiendo es hacerle daño aún por encima a esa tercera persona porque tú no estabas preparado. Lo importante en ese momento, en ese punto exacto de ese fracaso, es centrarse en una persona a la que tenéis que empezar a hacer feliz desde este instante. Y posiblemente la conozcáis todos. Es más, voy a escribirla en esta pizarra que tengo aquí. A ver si os suena. [enseña un espejo con la palabra "TÚ"] Todos y cada uno de vosotros. Primero tenéis que ser felices vosotros, y una vez que seáis felices vosotros mismos, solos, sin necesidad de ninguna otra persona, podéis hacer felices a quien os dé la gana. Bueno, ya termino, diciendo que... ¡Amar con locura! Porque es la única forma que conozco de cumplir los sueños. Muchas gracias. (Aplausos)