En la extensa llanura cerealista de Castillase encuentra el pueblo de Villarramiel. Muchos de sus vecinos se dedican al curtido artesanalde la piel en las diferentes tenerías que todavía se conservan. En casi todas ellas,las máquinas modernas se han incorporado al proceso de transformación de la piel,manteniendo esa fórmula que no altera la calidad del producto final. Pero hay una en la que la técnica de trabajoy las herramientas utilizadas apenas han sufrido modificaciones, y conserva ese sabor tradicionalque diferencia al artesano puro: es la fábrica de curtidos de Alfredo Sánchez. “Esto es conservando la piel. Se echa lasal y se tiene tres o cuatro días con sal para que se marche la sangre, es lo que cuidala piel, y una vez salada, puede durar hasta 5 años, si no, en 24 horas se destroza lapiel.” Unas veces, nuestro amigo Alfredo recibe laspieles ya saladas y conservadas directamente por los carniceros, pero por lo general élmismo se ocupa de echar la sal. Los meses de invierno son los mejores para este trabajo,pues la sal se licúa con facilidad y penetra mejor en los poros de la piel. “Ahora así, se puede conservar hasta cincoaños, estando bien salada como está ésta.” Una vez saladas las pieles, Alfredo las guardaamontonadas hasta que decida curtirlas. Las pieles se pueden conservar perfectamente con la sal durante varios años. Para curtirlas, Alfredo las selecciona primero por tamañosy calidades y luego las lleva a la pila de remojo. En la pila de remojo caben alrededor de 250pieles. Allí, nuestro amigo el curtidor las coloca estiradas para que estén en contactodirecto con el agua corriente durante algunos días hasta que se reblandezcan, salga lasuciedad y se elimine la sal que las ha conservado. “Depende de lo gruesas que sean y de losecas que estén. Estas, por ejemplo, tienen que estar una semana.” En el proceso de curtición la sal podríaretardar la depilación e impedir que la piel se hinchara en las operaciones posteriores. Durante una semana de remojo en la pila se ha extraído toda la sal. Sobre la tabla de descarnar, nuestro amigo el curtidor corta las cabezas y todos los desperdicios que llevanlas pieles. Si las piezas son muy grandes las parte en dos mitades para manejarlas mejor. Alfredo echa las pieles en el interior delbombo para proceder al depilado, que tiene por objeto la eliminación de la epidermis,los pelos y la lana. Va controlando a la vez el número de pieles para poder calcular lamezcla proporcional de cal apagada y sulfuro sódico que debe echar en el bombo. La mezclade cal y sulfuro ejercerá en la piel una acción enérgica, la hinchará, disolverála epidermis, el pelo y la lana y atacará las materias córneas. Alfredo incorporó el bombo al proceso tradicionalhace muy pocos años, lo que supuso un avance considerable. Hasta entonces, todo el trabajode preparación de las pieles para el curtido lo hacía en unos pozos llamados caleros donde debían estar varios días a remojo, removiéndolas continuamente. Hoy, con el giro uniforme delbombo durante cinco horas, la cal y el sulfuro actúan rápidamente porque conservan todaslas calorías en el hermético interior. Transcurridas las cinco horas, Alfredo abreel bombo y el agua arrastra toda la suciedad, los pelos y la lana que se han desprendido.Las pieles han tomado el color azul del sulfuro y para lavarlas el curtidor las pasa una auna por un baño de agua clara. El bombo tiene una capacidad para unas 500 pieles de oveja,según sea su tamaño. Ahora llega el momento de descarnar las pieles.Sobre la tabla de descarnar, que es un tronco de árbol cortado hace más de 200 años,nuestro amigo el curtidor quita con la cuchilla todas las asperezas que todavía están unidasa la piel, como carne, materias grasas, membranas,... El filo de la cuchilla de acero se gasta confacilidad y cada dos o tres pieles descarnadas el curtidor tiene que pasar la lima para avivarlo. “Se va comiendo poco a poco. Cuando es acerobueno tarda mucho en comerse, si es acero de lo de ahora lo afilas y a los dos díasya lo has comido, es un acero muy blandín que no vale para nada. El acero de antes eramuy bueno.” Una vez quitada la carne de las pieles, se mete al bombo para ablandar. Alfredo echa otra vez las pieles en el bombopara darles todos los baños de preparación que son necesarios antes del curtido. El primerproceso se llama desencalar y consiste en quitarles la cal con un baño de sulfato amónico,durante dos o tres días de giro continuo del bombo. Otras tres o cuatro jornadas necesitanlas pieles para ablandarse dando vueltas en el bombo con un baño de “rindiente”.Medio día más con sal gorda y ácido sulfúrico en un baño llamado “piquelar”, y conotras cinco o seis horas revolviéndose con “sintanol”, las pieles quedarán dispuestaspara el curtido. En los procesos de desencalar, rendir y “piquelar”no sólo se eliminan los agentes químicos absorvidos y las impurezas que quedan, sinoque, a la vez, la piel se hincha. “Ahora sacar las pieles del bombo para curtirlas.”. Después de una semana en el interior delbombo, las pieles están debidamente preparadas, es decir, limpias, depiladas e hinchadas,y quedan ya en disposición de ser convertidas en cuero por la acción de las materias curtientes. “Ahora, echarlas para curtir. Lo que seemplea es tanino, corteza de encina.” Actualmente, nuestro amigo el curtidor adquierela corteza de encina ya preparada para su uso y no debe elaborarla como en otros tiempos. “Antes se sacaba de los montes, se molíaen casa y se echaba.” Alfredo el curtidor introduce las pieles enlas dos molinetas, ya que según su tamaño deberán estar un tiempo determinado. “Eso depende, si son finas menos tiempoy si son gordas más tiempo. Si son gordas, quince días y si son finas, en seis días,la mitad.” En este proceso también influye el calor:En verano las pieles necesitan menos tiempo para curtirse que en el invierno. Nuestro amigo Alfredo trabaja pieles de todotipo de animales, desde los más grandes como vacas o caballos hasta los más pequeñoscomo las culebras. “Es que aquí hay de todo. Este montónparece el arca de Noé, hay lechazos, corderos, perros, de todo, novillos, éste es un novillo,ves, lo que pasa es que es un novillo delgau.” En cada molineta caben unas 200 pieles de tamaño medio. Para que queden bien curtidas permanecerána remojo en la disolución de taninos durante varios días según su tamaño. “Ahora, pues, estas de aquí 15 días yaquéllas una semana.” Alfredo controla el trabajo de las molinetas,sobre todo para evitar que las pieles se enganchen en el eje o en las aspas. Durante los días de curtido las molinetassólo se ponen en funcionamiento algunos minutos para que todas las pieles reciban la accióndel baño de taninos. “Ahora tiene que estar hasta mañana. ahoraya no se le da hasta mañana, porque si le das mucho ya empieza a coger .., coge una espumaque ya no se puede dar ya. Ya mañana está más hinchadas, ya han chupau el tanino, yentonces es cuando ya se puede dar bien, porque ahora te tira todo el agua y todo.” Cuando ya están curtidas, Alfredo saca laspieles de las molinetas y las extiende sobre un banco. Allí las dejará a escurrir duranteun par de días. Antes de proceder a los trabajos de preparacióndel cuero las pieles reciben otro lavado en la molineta de agua corriente. Luego, Alfredolas coloca sobre un banco para que queden bien estiradas y se escurran. Cuando las pieles ya están secas, el curtidorhace los ojales con el cuchillo para colgarlas del techo. Una vez curtidas, las pieles tienenunas propiedades diferentes a las que tenían antes y reciben el nombre de cueros. Después, Alfredo procede al alisado de laspieles, que consiste en “quitarles la vena”, como dicen los curtidores. “Que quede la piel estirada, bien estirada,porque todas las pieles tienen vena, y claro, al estirarla se quita la vena.” Para ello, pasa la “estira”, que es unacuchilla de hierro, por la flor de la piel, todavía húmeda, que es la cara que teníael pelo. Cuando las pieles están alisadas, Alfredolas sube al secadero para colgarlas del techo y quitarles la humedad que todavía les queda.El secado de las pieles depende de la temperatura ambiente, y por lo tanto en los meses calurososdel verano necesitan pocas horas o como mucho un día, mientras que en el invierno tardanmás de una semana en eliminar toda la humedad. Cuando ya están secas, nuestro amigo el curtidorlas descuelga y las coloca sobre la mesa para quitarles todos los repelones, igualarlasy dejarlas bien terminadas. Una a una, alisa las pieles con la “estira” y repasa con el cuchillo todo el contorno de la piel. Sobre la mesa de trabajo, Alfredo coloca unasobre otra varias pieles con la flor hacia arriba para engrasarlas y darles color. “Esto se les pone aceite para que coja laanilina, se hacen dos labores a la vez, engrasar y teñir.” “El aceite de girasol, aceitede girasol.” En el aceite de girasol, que el curtidor necesitapara engrasar los cueros, ha mezclado anilina del color que quiere dar a la piel, normalmenteamarilla o naranja. Cuando las pieles están engrasadas las deja tendidas durante uno o dos días en el suelo para que absorban bien el aceite y el color. Para rebajar los cueros Alfredo necesita deuna herramienta de acero bien afilada llamada “estira de rebajar”. Antes de comenzarsu trabajo repasa el corte con la lima. Esta operación de rebajar consiste en rascar lapiel por la parte de la carne para que quede más flexible y fina atendiendo a los gustosdel cliente. “A la medida que quiera el consumidor, elque la compra. Las más frecuentes, pues 2 mm. para hacer calzado.” “Para hacer cosasfinas pues tiene que ser de 1 mm.” La experiencia de Alfredo es suficiente paracalcular a ojo y al tacto el grueso de las piezas de cuero. “Después de ésto, el paso siguiente esablandarla.” Al rebajar el cuero los bordes han quedadocon una pelusilla y hay que recortarlos para que la pieza sea perfecta. “Ahora es corcharla, ablandar la piel. Estose llama corcha, es un corcho puesto en un cacho de madera.” Alfredo efectúa la operación de corchardoblando la piel, flor contra flor, y frotando por encima con la corcha. De este modo lapiel se mueve y se frota contra sí misma, adquiriendo la superficie un aspecto brillantey aterciopelado. “Esto se llama estirar la piel. Quitar elgranillo que ha salido de la colcha y sacarla brillo también.” Según el uso que vaya a tener el cuero, necesitaráuna terminación más elaborada. Alfredo quita el grano y abrillanta la flor con una “estira”de mármol. “Para calzau, para marroquinería, paraartesanía, para todo, en general para todo.” Las pieles curtidas ya han quedado dispuestaspara la venta. Los clientes de Alfredo Sánchez suelen ser generalmente los artesanos delcuero que buscan una materia prima de calidad y elaborada totalmente a mano. Al final, esas pieles obtenidas de los animalessacrificados y curtidas artesanalmente, pasarán a ser objetos de uso cotidiano u ornamentales en manos de zapateros, guarnicioneros y otros artesanos del cuero.