Las arenas devoran, y de ellas brota nueva vida. En el ciclo de la vida y la muerte, lo que se siembra se cosecha. Cuando el orden moral se altera la sentencia no tardará en llegar. Cada alma será pesada en la balanza. Es inútil. Juro defender las leyes y castigar el mal. No importa lo arduo que sea este camino lo recorreré hasta el final. ¡La justicia se hará gracias a mí! Hasta que un día la humanidad sea purificada y liberada de sus pecados.