Traductor: Sebastian VeintimillaRevisor: Sebastian Betti Para muchos de nosotros, yo incluida, nuestros días se sienten llenos deun millón de pequeñas interrupciones. Y esto es cierto incluso en nuestros días libres. Tal vez hayas recibidouna llamada en la playa, enviado un mensaje de texto a tu jefe desde el supermercado o escrito un correo a un colegamientras estabas de picnic con tu familia. Nos hemos convencido de queestos comportamientos no son gran cosa. Es solo un correo electrónico. Pero hay un costo realen estas interrupciones, y hay estrategias inteligentesque todos podemos seguir para proteger mejor nuestro tiempo. (Música) [La manera en la que trabajamos] Estos sucesos parecen muy pequeños en el momento, y sin embargo la investigación sugiereque juntos suman una pérdida tremenda. La constante fluencia laboralen nuestras vidas personales puede aumentar nuestro estrés y socavar nuestra felicidad. Entonces, ¿cuál es el costo? En un estudio, un grupo de investigadoresreclutaron a padres que visitaban un museo de cienciascon sus hijos. A algunos padres se les dijo que revisaransu teléfono tanto como sea posible; a otros que lo revisaran tan poco como sea posible. Después de la visita, los padres que usaron sus teléfonos reportaron que la experienciafue considerablemente menos significativa. También se sintieron mucho más solos. En otro estudio, turistas a los que se les pidiótener sus teléfonos fuera mientras visitaban una iglesia icónica recordaron menos detalles una semana después. Y en mi investigación, empleados a los que se les pagópor su desempeño pasaron cada vez menos tiempo interactuando con amigos y familiares, y más y más tiempointeractuando con colegas y clientes. Estas constantes interrupciones también tienen un costo para las organizaciones. Las empresas pierden 32 días de productividad cada año ante la depresión de sus empleados, que a menudo es causada por el estrés y el agotamiento de nuestra cultura siempre activa. A pesar de saberlo, yo también me he encontrado enfocadaen "distracciones laborales urgentes" durante momentos importantes de la vida. Recientemente, me encontréenviando un mensaje de texto a un cliente en medio de la primeraecografía de mi primer hijo... cliente feliz, futura mamá culpable. Cuando sumas todos estos momentos, la suma total es una vidamermando en el significado, alegría, conexión e incluso memoria. Mientras rehacemos nuestros modelos de trabajo a raíz de la pandemia, ahora es nuestra oportunidad de crearuna nueva cultura que respete el tiempo. Y la forma de hacer este gran cambio es a través de pequeños pasosque podemos tomar ahora mismo. El primer paso que debemos dares replantear el descanso. Reflexiona por un momento acerca de lo que piensas cuando escuchas la palabra “descansar”. Suena increíble, ¿verdad? Pero en mi mente, inmediatamente me preocupo por no ser lo suficientemente productiva o defraudar a mis colegas. Cuando tengamos tiempo libre, necesitamos encontrar formas en las quepodamos disfrutar el momento presente y saborear el tiempo libreque tenemos disponible, en lugar de verlo como barrera improductiva para nuestro trabajo. Una estrategia específica que podemos tomar es tratar a nuestro próximofin de semana como vacaciones. El viernes en la tarde, anota cómo actuarías y te comportaríassi estuvieses de vacaciones. Tal vez tú y tu parejacompren una botella de vino y vean clips en líneade la Torre Eiffel. Quizás visiten un café local y escuchen música en vivo. O tal vez darían una largacaminata a la mitad del día sin teléfono y sin agenda. El plan no tiene por qué sercaro o extravagante. Otra estrategia puede sercrear límites claros para el tiempo libre. En lugar de decir: “Estoy fuera de la oficina. Siéntete libre de contactarme cuando quieras”, di: "Estaré desconectado. Llámame solo si es urgente". Para defender estos objetivos personales, trabajen juntos como equipo. Establezcan metas de equipo para el tiempo personal. Háganlo en público, recopilen datos y designen responsabilidades. Estos objetivos pueden sonar como, “No revisaré el correo electrónicoentre las 6:00 y las 20:00”; "Cenaré con mi familiacuatro noches a la semana " o "Iré a correr al mediodía". Revisen el progreso de su equipo y vean cómo les va a todos. Si tú o tus compañeros de equipo no tienen éxito, trabajen juntos para ayudarsea lograr sus metas personales. Por último, pueden negociar más tiempo para evitar que el trabajo se filtreen su vida personal. En la escuela de negocios, enseñoa los estudiantes a negociar el salario pero dense cuenta de que casi no hablésobre negociar más tiempo. ¿Cómo es esto en la práctica? Pueden pedir más tiempoen plazos ajustables en el trabajo. Si tu cliente solicitaun entregable para el lunes por la mañana, pide una extensiónhasta el martes por la tarde para que no te encuentres trabajandoen tu merecido fin de semana. Y no te preocupes demasiado por la reputación. La calidad es verdaderamentela métrica que más importa. En mis datos, empleados que proactivamentepidieron más tiempo reportaron niveles más bajosde estrés y agotamiento, y fueron vistos como más comprometidosy profesionales por sus compañeros. Estos son cambios pequeños pero poderosospara no solo replantear el descanso, sino para recuperarlo. Una vez que descubras el profundo impactoque estos cambios pueden tener, te sentirás empoderado para exigirque los demás respeten y ajusten su enfoque al tiempo. Tal vez incluso se sientan inspirados para también reconstruir los momentos fracturados de sus vidas.